Arrancó el mes del arquitecto y con el inicio de noviembre se publicaron los primeros testimonios de primeros proyectos de experiencias de arquitectura. Las publicaciones se harán durante todo el mes, a razón de una por día.

El ciclo fue inaugurado por alguien que no necesita una presentación: el arquitecto Mariano Arana, quien relató su primera experiencia de un Concurso Internacional, cuyo resultado despertó un gran reconocimiento para quien en aquel entonces era estudiante de la FADU y sus compañeros.

Se trataba de un anteproyecto para un llamado público que se hizo en Argentina. Más específicamente dos grandes edificios en la plaza central de la ciudad de la Plata. “Tuvimos una suerte extraordinaria – o un talento, pero me gusta decir más suerte-. Sacar el segundo premio fue un batacazo maravilloso, que generó un impacto brutal en la Facultad y nos hizo mostrar aquel proyecto”, expresó Arana en relación con su primera experiencia dentro de la profesión.

La muestra continuó esta semana con la historia de Eneida de León. La arquitecta y ex presidenta de SAU, quien relató sus primeros pasos resaltando la importancia de que, finalizando su carrera, su primera experiencia fue fruto de una propuesta que le hizo una amiga.

Eneida expresó que “la arquitecta Mabel Ubiría, quien tenía una cooperativa de ayuda mutua” fue quien le acercó la invitación a participar de una actividad que la marcó hasta hoy en día. “El hecho de querer la cooperativa, y fundamentalmente querer la cooperativa de ayuda mutua, como una solución habitacional increíble”.

El arquitecto y socio de SAU desde hace más de 30 años, Raúl Pérez Benech, también en épocas de su formación, participó de una obra especial por su relación con su lugar de crianza. Se trató de una obra para el Club Esparta, de Colonia Valdense, donde Benech culminó sus estudios en primaria y secundaria.
“Me convocaron para hacer una piscina semi-olímpica de 25 metros y una sección de vestuarios. Estuve apuntalado, porque no podía ejercer, por el arquitecto Walter Bonilla. Salió un proyecto excelente, con todos los nervios del mundo por ser la primera oportunidad de trabajar”.
 
El primer proyecto de la arquitecta Silvana Pissano, exdirectora del Departamento de Desarrollo Urbano de la Intendencia de Montevideo, estuvo marcado por ser un desafío que implicaba trabajar con una multiplicidad de clientes. 

“Fue una Cooperativa de viviendas, 19 familias que se habían nucleado. Esas primeras asambleas donde tenías que escuchar, para luego transformar esas necesidades y deseos en un lugar para vivir. Una puerta maravillosa, para entrar en el mundo de la arquitectura.”

 

En las redes de SAU continuarán publicándose las experiencias, desafíos y realidades que vivieron diferentes representantes de aquello que une a todos los arquitectos: los primeros pasos en la profesión.