territoriourbanismovivienda colectiva

Autores: Carlos Ott Arquitectos en asociación con Carlos Ponce de León Arquitectos

La vida en común sigue siendo posible de desarrollar en altura, revitalizando áreas semiabandonadas de ciudades existentes.

La vivienda colectiva sigue siendo el principal elemento de la ciudad compacta y es por ese motivo que nos referimos a estos proyectos de vivienda colectiva como elementos arquitectónicos principales, teniendo en cuenta que la densidad urbana se compone también de equipamientos, edificios de oficinas, centros comerciales, lugares de recreación y ocio, cultura, salud y educación, y nodos de en los que se produzca el encuentro y la relación entre los ciudadanos.

Las densidades dinamizan los centros urbanos, articulando espacios urbanos subutilizados en beneficio del barrio, la ciudad y la rambla costera.

Ambos proyectos se asientan en dos predios existentes con gran presencia visual sobre el territorio y sobre la bahía de Montevideo, el Centro, la Aguada, la Ciudad Vieja, y el Cerro de Montevideo.

Los diseños propuestos cuestionan los modelos existentes de viviendas en altura con fines especulativos que, o bien tienden a privilegiar la planta, por el simple método de apilar viviendas, o privilegian el proyecto urbano, comprimiendo las viviendas en un caparazón predeterminado.

Ambos proyectos buscan combinar viviendas funcionales de interés social con diseños arquitectónicos que revitalicen el skyline de la ciudad.

Las fachadas de los dos edificios se desarrollaron buscando destacar elementos aleatorios de elementos estándares de las fachadas, como ser los balcones, y los juegos de luces y sombras en los distintos horarios del día y la noche.

El tratamiento de las fachadas son más que un mero gesto formal, son una expresión de lo que contienen en su interior.