Hotel Colón (Palacio Gandós)
*Monumento Histórico Nacional desde 1975
En este número del BSAU continuamos con el reconocimiento de obras destacadas por su aporte al acervo de la ciudad. Hoy presentamos al remozado ex-Hotel Colón, convertido en la sede de las oficinas de un organismo internacional. Con su fuerte presencia urbana, el ahora rehabilitado edificio, se suma a las múltiples operaciones de renovación y transformación que se vienen concretando en ese sector de la Ciudad Vieja, tanto en sus edificios como en el espacio público.
Los actuales destinos de los locales comerciales de planta baja se suman a la movida cultural que empieza en las calles y se prolonga en salas de exposición, librerías, anticuarios, locales gastronómicos y de espectáculos.
Su recuperación es doblemente importante, en tanto puso fin al proceso de abandono y deterioro que sufrió durante décadas, pero además porque se incorpora a la “Nueva Ciudad Vieja”, en un circuito en el que en pocas cuadras reunimos a las peatonales Sarandí, Bacacay y Policía Vieja; a la Plaza Matriz con la Catedral, el Cabildo y el Club Uruguay y a la calle Rincón con Casa Mojana y el Ex Hotel Colón.
Singular ejemplo de la arquitectura afrancesada de inicios del siglo pasado, el valor de esta obra lo encontramos en la espacialidad de sus patios interiores cubiertos por claraboyas y en el tratamiento de sus fachadas en las que se destacan las mansardas y la torre que remata la esquina y los encuentros con los edificios vecinos. Todo esto se completa con el trabajo de herrería de las barandas de los múltiples balcones curvos que lo enriquecen y que fueron emblema en los años ´80 del Grupo de Estudios Urbanos, que con su imagen fotográfica nos llamaba a “no construir el mañana, demoliendo el ayer”.
Hoy la Ciudad Vieja busca el difícil equilibrio que supone integrar el lenguaje contemporáneo de las nuevas obras, conservando vivo su valioso patrimonio. En esto los arquitectos tenemos mucho para aportar.